Luis Gómez (1968)

Quiet Room, 1998

Escultura de madera

Quiet Room es una escultura inmensa que trata de rehuir el lugar común en que se había convertido el tema migratorio, sobre todo en su representación. El autor encontró en la literatura alusiones a la isla como lugar inhóspito, como bestia del mar y como tumba (Pinocho, Moby Dick o Jonas).

Quiet Room es una manera elíptica de hablar sobre el tema migratorio. Sin embargo, a Luis Gómez aún le atraía la idea de tantear ese lugar común, cuqueándolo, por eso la obra está hecha como si se construyera un bote, un bote inservible, casi un submarino de “palo”. Para cerrar el ciclo significativo, la madera usada para fabricarla era de ataúd, hecho que eleva el drama de la pieza.

Al mismo tiempo la obra pretende demostrar que una instalación es básicamente espacio y no disposición. Era como hacer una broma donde una escultura crecía tanto que casi se tragaba el espacio y podías estar dentro de ella. En realidad la idea de echarle mano a la imagen de la ballena le daba al autor un pretexto “natural” para su intención, sin que se viera como la maximización de un objeto pequeño.